Esta semana, varios responsables de la política monetaria estadounidense declararon, lo que ayudó a consolidar la opinión de que es poco probable que se produzca un aumento de tasas en la reunión del FOMC de este mes. El presidente de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, dijo que la política monetaria estaba “en un buen lugar” y que examinar los datos entrantes determinará si la política es lo suficientemente restrictiva como para devolver la inflación al objetivo de la Reserva Federal. Varios miembros de la FED con visión alcista señalaron que, si bien en última instancia podría ser necesario un ajuste adicional, no es necesario aumentar las tasas en la próxima reunión del 20 de setiembre. Los mercados de futuros estuvieron alineados, ya que la probabilidad de aumentar en la próxima reunión es del 7%, mientras que las probabilidades de un aumento en noviembre subieron al 46%.
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